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sábado, 4 de agosto de 2012

Reseña: Pétalos de papel.


Sinopsis

“Aquel libro me arrastró dentro de sus páginas antes de que yo pudiera siquiera imaginar su secreto. La realidad cayó y se deshizo a mi alrededor. Al otro lado me esperaba él. Marcus Abberlain. Ni la distancia de mil mundos pudo evitar que le encontrara”.

"Vino en las alas de la primavera. Llegó de improviso, como las flores y los deseos. Se hizo un hueco en el corazón como sólo saben hacerlo los sueños que sobreviven al invierno. No fue el libro quien trajo a Ilyria Blackwood hasta aquí. Fue el destino".

Amyas, capital de Albion. Dicen que todos los días llega al reino al menos un nuevo visitante…
Todo tiene un orden impuesto en ese país inalcanzable: los nobles dictaminan sus normas escondidos tras sonrisas fingidas y bailes a medianoche. Los extranjeros, personajes alejados de las páginas de sus libros, están condenados a servirles. La sociedad ahoga y esclaviza sin que nadie se rebele contra ella.

Alterar el orden siempre es peligroso. Enamorarse es solo el principio.
Autoras: Iria G. Parente y Selene M. Pascual.
                                                                                                 
Opinión personal
He tenido que darme una buena ducha para calmar todos los nervios y los sentimientos que me ha producido este libro... 
Los últimos libros que he leído me han encantado y éste no se queda atrás, es más, no hay una escala en la que pueda colocarlo ya que no tendría la suficiente puntuación.
Comenzamos Pétalos de papel al lado del Conde Marcus Abberlain. Él, junto con su fiel sirviente Yinn, va en busca del extranjero que se ha escapado de su libro para devolverlo a su hogar... Sí! Suena un poco raro, pero así es. En el mundo que han creado estas dos autoras, hay todo tipo de seres que salen de todo tipo de libros y Marcus es el encargado de devolverlos a su lugar de origen.
Y así es como conoce a Illyria. Ella llega a Albion, y nada más pisar tierra, se encuentra en un callejón con un hombre lobo del que el conde la salva, devolviendo a la bestia a su hogar.
Marcus, como buen samaritano que es, la acoge en su casa y es allí donde se despierta la muchacha, con el sirviente y la hija de Marcus, la pequeña Charlotte(Lottie ^ ^) cuchicheando al lado de su cama.
Illyria no tiene ni la más remota idea de lo que hace allí: La noche anterior estaba en su amada librería, huyendo de la pesadilla de una cena que no había sido demasiado dichosa, y ahora está en una mansión, rodeada de gente que no conoce y que, encima visten y se comportan como si pertenecieran a la época victoriana. Si el patriarca hasta se escandaliza al verla en camisón en el pasillo, incluso sin que ninguna parte de su piel se dejara ver!
El libro está contado en primera persona y los capítulos se van alternando entre Illyria(debo decir que me he enamorado totalmente de este nombre!) y Marcus.
La lectura de este libro ha sido pura dulzura para mi paladar. Las palabras suaves, mágicas y poéticas del conde Abberlain me transportaban sin remedio hacia él, sus pensamientos, sus anhelos, su angustia, sus pétalos... Así como también hacia su casa, hacia su adorable hija Charlotte, hacia el increíble amable y gracioso Yinn, hacia la tímida Ángela, hacia su bastante odioso hermano Rowan y hacia esa chica que ha acogido bajo su protección hasta que encuentre su libro para poder devolverla a su hogar... Aunque le saque de quicio con sus malos modales y su comportamiento que nada tiene que ver con el de una buena dama, siendo una mala influencia para Lottie.

"Marcus

Primero los guantes, para ocultar al mundo mis manos manchadas de sangre. Después la camisa,
para esconder los latidos de mi corazón. A medida que me abrocho los botones, retomo
la calma y vuelvo a tener las riendas de la situación, poniéndome la máscara y
agazapándome tras su sólida consistencia, escapando así de los golpes del mundo en el
que vivo. Que nadie sepa mis secretos. Que nadie se hunda en mis ojos."


Illyria, también con sus palabras, amargas al principio, y dulces mientras se va acostumbrando a su temporal hogar, nos hace sentir su nostalgia, su miedo, su preocupación pero también el gran cariño que le coge a Lottie y la amistad que estrecha con Yinn, el extranjero que es capaz de sonreírle sin hipocresía y hablar con ella como una igual.
Y es que, en este libro, a las persona como Illyria, se las denomina como "extranjeros", tienen  unas marcas en el cuerpo que les aparece al llegar a Amyas, y son duramente tratados por parte de los nobles, los autóctonos de Albion, ya que éstos defienden que su ciudad es la que está en la cima de la cúspide, su sangre es pura y todos los demás mundos, los mil universos distintos que viven entre las páginas de los libros que los rodean y sus habitantes deben, TIENEN que jurarles pleitesía y resignarse a ser sus esclavos. Tal es la cosa que, a los extranjeros, se les marca para que los demás sepan que pertenecen a una familia concreta y no obedecerán órdenes de ninguna persona excepto de su Tháyr (amo, en el idioma de Yinn)

"Illyria

—¿Tan grave es?
—Yinn, me ha visto en sujetador y…
—¿Esa tira tan graciosa que me haces lavar a veces? ¿Para qué sirve exactamente?
Lo miro, ladeando la cabeza. Me fijo en mi pecho y luego en él. Ante mi gesto, el
genio arquea las cejas.
—¿Solo lleváis eso para cubriros…?
—Solo.
—¿Y la otra prenda que lavo…?
—Adivina."


He disfrutado como una niña con un caramelo. Estoy totalment e a los pies de estas dos increíbles escritoras. Sus palabras salen de las páginas, te acarician suavemente, se introducen en tu mente, te susurran secretos y palabras de amor, te provocan escalofríos de terror, suspiros de placer y se deslizan por tus mejillas a modo de lágrimas en medio de la noche, con la luna como testigo. He reído a carcajadas con las conversaciones entre Yinn e Illyria (aunque a veces tenía que ahogarlas porque eran las seis de la mañana y mis vecinos hubieran considerado seriamente acabar con mi vida), me he emocionado y encariñado sin remedio de la adorable hija del conde. He conocido un mundo totalmente ajeno al mío, pero que a la vez se parecía tanto... He sufrido con el pasado de Marcus y sus demonios, ya que he vivido sus pesadillas de primera mano. He paladeado el sabor de las lágrimas saladas en mi boca. He odiado a aquellos hipócritas que me rodeaban y miraban con prepotencia cuando me adentraba en las calles de Amyas. Mi propio corazón ha corrido desbocado por la noche, bajo un manzano y con un millón de deseos cayendo sobre él, en medio de un baile celestial y se ha roto en pedazos en el centro de una habitación en la que antaño se había sentido totalmente seguro.
Incluso la carta del final, los agradecimientos de las autoras, ha sido un placer leerla.
Sin embargo, soy yo la que les doy las gracias. Gracias por demostrarme que se pueden sentir tantas cosas con las palabras.Gracias por hacerme sentir esas preciosas mariposillas en el estómago que hacía tiempo que buscaba, sin llegar a encontrar, cuando ya había perdido la esperanza... 
Como las mariposillas que yo les regalo ahora con todo mi corazón, al igual que ellas me han regalado sus palabras, las cuales se quedaran en mi corazón hasta mi último aliento.




 Aquí, el blog del libro y las autoras donde podéis descargarlo:



Ya estáis tardando en introduciros en el mundo de Albion!



2 comentarios:

  1. Gracias a ti por estas palabras tan amables. Gracias a ti por leernos y por disfrutar. Gracias por permitirte viajar entre nuestras líneas y dejarte transportar a Albion.

    Escribir vale la pena cuando alguien es feliz leyéndote. Gracias por las cinco mariposas.

    Un saludo,

    unas autoras agradecidas ;)

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    1. Gracias por sacar unos minutos de vuestro tiempo y leer mi reseña! ^^
      Estoy deseando volver a Albion y perderme en sus historias!
      Besos! ^ ^

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